El mercado de América Latina y el Caribe está captando la atención de inversores y empresas de todo el mundo, en general, y de Vietnam, en particular, convirtiéndose en uno de los puntos destacados en el mapa económico global. Con 25 años de desarrollo en Cuba, ¿cuáles son las oportunidades que Thai Binh ha identificado y aprovechado para consolidar su posición en esta nación caribeña y expandirse gradualmente hacia los mercados circundantes?
En los últimos años, las empresas vietnamitas han enfrentado numerosos desafíos a medida que los mercados de exportación clave como Estados Unidos, Japón y la Unión Europea se han vuelto cada vez más competitivos. Los productos vietnamitas tienen que competir con fuertes rivales y enfrentar un aumento en las barreras comerciales y obstáculos cada vez más complejos. En este contexto, el mercado de América Latina y el Caribe ha comenzado a atraer la atención de las empresas vietnamitas debido a su población numerosa (casi 700 millones de personas) y los requisitos de productos no tan estrictos como los del mercado de los países desarrollados. Ingresar a este mercado potencial ayuda a reducir la dependencia de los principales mercados de exportación de Vietnam y elevar la posición de las empresas vietnamitas.
Además, las relaciones económicas – políticas entre Vietnam y América Latina y el Caribe han abierto muchas oportunidades para las empresas. Ambos lados están implementando de forma efectiva muchos acuerdos comerciales para impulsar las relaciones económicas y de inversión, que incluyen el CPTPP, el VCFTA y convenios comerciales con Cuba. Según los especialistas en este ramo, las políticas comerciales e inversiones de Vietnam y de los países latinoamericanos y caribeños han experimentado cambios significativos hacia la apertura de mercados, lo que crea las condiciones favorables a las relaciones multifacéticas de acuerdo con las leyes internacionales. Esto se refleja claramente en el intercambio comercial entre Vietnam y los mercados de América Latina y el Caribe en 2021. Especialmente, el comercio ha experimentado un crecimiento significativo, con Colombia alcanzó los 674,7 millones de USD, un aumento del 41,5%; Perú con 633,7 millones, un aumento del 62%; y Panamá con 465,6 millones, un aumento del 45,5%.
A pesar de las oportunidades, siguen existiendo desafíos como la distancia geográfica,… que son obstáculos que generen altos costos de transporte y reducen la competitividad del precio de los bienes para muchas empresas las que desean ingresar y expandirse en América Latina y el Caribe. Consciente de esto, Thai Binh ha estado trabajando para superar esta dificultad al acercarse y consolidar su posición en Cuba, una entrada a América Latina. Con 25 años de experiencia en el comercio y la fabricación en este país, Thai Binh posee los recursos necesarios para conquistar los mercados circunstantes.
Cuando se evalúa el potencial de Cuba como un puente hacia los mercados de América Latina y el Caribe, muchas empresas pueden sentir cierta aprensión debido a la población relativamente pequeña de la isla (alrededor de 11 millones de habitantes) y las diferencias económicas y políticas. Sin embargo, Thai Binh ve oportunidades incluso en los desafíos aparentes: la población no tan grande significa que no se necesita una gran escala de comercio y de inversión para obtener una cuota de mercado. Tras un estudio exhaustivo, Thai Binh ha descubierto que, aunque la mayoría de los bienes de consumo en Cuba son importados, las empresas cubanas están priorizando la adquisición de los productos fabricados localmente como reemplazo. Esta nueva tendencia representa tanto un desafío como una oportunidad para las empresas vietnamitas. Para Thai Binh, este cambio es una oportunidad para su transformación de negocios, promoviendo la producción en Cuba.
Desde el punto de vista político, las fructíferas relaciones entre Vietnam y Cuba son un terreno fértil para que las empresas siembren y cosechen. Vietnam es actualmente el mayor inversor extranjero de Asia en Cuba. El Acuerdo de Comercio Vietnam-Cuba, firmado el 9 de noviembre de 2018 y que entró en vigor el 1 de abril de 2020, ha establecido muchas ventajas comerciales para las empresas de ambos países. Según este acuerdo, las dos partes se comprometen a eliminar o reducir aranceles para casi el 100% de los productos importados de los mercados respectivos en un plazo de cinco años. Este es un paso importante para que Thai Binh continúe expandiéndose la comercialización y consolidándose su posición que ha construido durante más de 20 años.
En un ámbito más amplio, las relaciones de Cuba con el mundo, después de la visita del presidente estadounidense Barack Obama en 2016, Cuba ha estado ajustando algunas políticas para mejorar el entorno de inversión. Para promover el desarrollo de la Zona Especial de Desarrollo de Mariel, Cuba ha implementado políticas de exención de impuestos atractivas para los inversores en sectores de fabricación de bienes de consumo, biotecnología, farmacéuticos y otras áreas.
Aprovechando esta oportunidad, Thai Binh entró oficialmente en la producción e inversión. Desde 2019 hasta la fecha, Thai Binh ha puesto en funcionamiento y operación continua tres proyectos:
La fábrica de pañales desechables y almohadillas sanitarias de Thai Binh Global: Construida para satisfacer las necesidades de uso de culeros en Cuba. Esto ayudará a proporcionar pañales desechables y almohadillas sanitarias a los consumidores locales.
La Sociedad Anónima SUCHEL TBV (Fábrica de detergente en polvo y productos químicos): Un proyecto conjunto entre las empresas Industrias Nexus S.A. de Cuba y Thai Binh Detergente de Vietnam, una filial del Grupo Thai Binh. La fábrica tiene como objetivo satisfacer el 100% de la demanda de detergente en polvo y líquido de los consumidores cubanos y exportar sus productos a otras naciones latinoamericanos y caribeños.
El parque de energía solar TBD de 20MW de la empresa Thai Binh Green Power: Con una capacidad instalada de 23,13 MWp y una capacidad conectada a la red de 20MW, lo que contribuye al proceso de industrialización y modernización de Cuba.
Con la exitosa operación de dos plantas manufactureras y un parque energético, Thai Binh ha superado los desafíos de la distancia geográfica para acercarse a América Latina y el Caribe: la fábrica ubicada directamente en Cuba ayudará a que los productos reduzcan los costos de envío y aumenten la competitividad de los precios. No solo eso, construir su propia fábrica ayuda a Thai Binh a ser proactivo y brindar fácilmente los productos al gusto del pueblo cubano, así como a ampliar la escala de producción para satisfacer la demanda de los consumidores en el mercado latinoamericano y caribeño.
Para lograr ciertos éxitos en la «tierra prometida», sin duda se necesitarán muchos esfuerzos de adaptación y perseverancia por parte de todo el colectivo de trabajadores de Thai Binh. Pero con los firmes pasos de hoy, el futuro camino de Thai Binh promete explotar plenamente su potencial y cosechar resultados destacados en el mercado de América Latina y el Caribe.
En conclusión, el mercado latinoamericano y caribeño, con su gran población, su diversa demanda de bienes y sus acuerdos de promoción comercial firmados, ha ayudado a que esta región se convierta en un punto brillante a los ojos de muchas empresas e inversores. Aunque todavía existen desafíos, si aprovechamos las oportunidades y adaptamos con flexibilidad de acuerdo con las condiciones socioeconómicas, cualquier dificultad puede transformarse en potencial. El éxito actual de Thai Binh es una afirmación del gran potencial de los mercados de América Latina y el Caribe si se acercan y desarrollan en la dirección correcta.